SAO PAULO, 6 oct (Xinhua) — El impacto de los aranceles del 50 por ciento aplicados por Estados Unidos a productos brasileños desde el 6 de agosto pasado ha sido menor de lo esperado, según un estudio divulgado hoy lunes por la Cámara de Comercio de Estados Unidos-Brasil (Amcham Brasil).
El informe difundido a dos meses de la entrada en vigor de las nuevas tarifas se basa en datos del Ministerio de Desarrollo, Industria, Comercio y Servicios de Brasil, muestra que el 44,6 por ciento de los productos exportados por Brasil a Estados Unidos tuvieron el arancel máximo (50 por ciento), el 29,5 por ciento cargas menores y el 25,9 por ciento quedó exento.
De acuerdo con el director de Políticas Públicas y Relaciones Gubernamentales de la Amcham Brasil, Fabrizio Panzini, los productos más afectados como café, azúcar y carne corresponden a “commodities” (materias primas) con mayor posibilidad de ser dirigidos hacia otros mercados.
En declaraciones a la cadena de noticias Globo, Panzini explicó que hay sectores más frágiles como el de la madera y los muebles, así como maquinaria pesada y miel, cuyo impacto por el llamado “tarifazo” (aranceles) de Estados Unidos podría derribar sin el auxilio del Gobierno federal.
El Gobierno brasileño lanzó en tal sentido el programa Brasil Soberano que busca respaldar a los segmentos productivos más afectados por la decisión del presidente estadounidense, Donald Trump.
Del total de exportaciones brasileñas a Estados Unidos, el 74,1 por ciento ha sido alcanzado por algún tipo de sobretasa este 2025, según estadísticas de la Amcham Brasil.
Bienes industriales como hierro fundido y aeronaves tienen un gravamen recíproco del 10 por ciento, mientras que acero, aluminio y cobre resultaron afectados con el 50 por ciento, al tiempo que para automóviles y autopartes es de 25 por ciento.
Por su parte, el abogado especialista en comercio exterior, Leonardo Briganti, opinó que el “tarifazo” resultó perjudicial en el corto plazo, aunque con consecuencias distintas a las buscadas por Washington, ya que se encarecieron los costos y se redujo el ingreso de empresas importadoras.