TOKIO, 8 jul (Xinhua) — El primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, dijo hoy martes que la decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de imponer un arancel del 25 por ciento a Japón es “verdaderamente lamentable”, si bien aclaró que la negociación proseguirá hasta alcanzar un acuerdo mutuamente beneficioso.
En una reunión del grupo de trabajo sobre aranceles, Ishiba declaró que el Gobierno no titubeará a la hora de defender los intereses nacionales en rondas comerciales futuras, prometiendo hacer todo lo posible para mitigar el impacto de esta inminente subida arancelaria sobre una economía de orientación exportadora como Japón.
“Seguiremos sosteniendo negociaciones con EE. UU. para explorar la posibilidad de alcanzar un acuerdo mutuamente beneficioso mientras protegemos nuestros intereses nacionales”, manifestó Ishiba durante la reunión.
Ishiba también señaló que la falta de progreso para cerrar un acuerdo comercial se debió a que “el Gobierno ha evitado hacer compromisos apresuradamente a la vez que demandaba y protegía lo que era necesario”.
A partir del 1 de agosto, Estados Unidos impondrá un arancel del 25 por ciento a sus importaciones desde Japón, anunció Trump este lunes, advirtiendo de que cualquier subida arancelaria sobre bienes estadounidenses será respondida con un incremento equivalente por su Administración.
El nuevo arancel, ligeramente más alto que la tarifa “recíproca” anunciada el 12 de abril, se impondrá al margen de los aranceles sectoriales actualmente en vigor, que incluyen una tasa arancelaria del 25 por ciento sobre vehículos y partes automovilísticos y un 50 por ciento para acero y aluminio. Trump comunicó a Ishiba la nueva tasa arancelaria por carta, una misiva que publicó en redes sociales.
Trump también anunció el mismo día nuevos aranceles contra otros 13 países, entre los cuales están República de Corea (25 por ciento), Sudáfrica (30 por ciento), Serbia (35 por ciento), Bangladesh (35 por ciento), Tailandia (36 por ciento), Camboya (36 por ciento), Myanmar (40 por ciento) y Laos (40 por ciento).